Origen de las Gotas de Leche: “Apuntaban a los problemas fundamentales para una mejor sobrevivencia de los niños, porque la mortalidad era pavorosa”

La pobreza en nuestro país motivó la generación de muchas iniciativas altruistas por parte de la clase privilegiada de la época. La precariedad era impactante y se traducía en efectos concretos: desnutrición, alta tasa de mortalidad y enfermedades, sobre todo en los niños más pequeños expuestos al clima, las deplorables condiciones sanitarias y la falta de alimentos

Ante este escenario, surge la idea de instalar, emulando a Francia, centros donde se proveyera de alimento a niños y niñas. Esta iniciativa fue concretada por el Patronato Nacional de la Infancia, y posteriormente se expandieron por Chile, aunque no todas dependieron directamente de esta institución.

El objetivo principal no fue otro más que alimentar a los niños y niñas más vulnerables, mediante la entrega de leche y alimentos, además otorgar un espacio donde se reforzara el vínculo madre hijo. https://www.memoriachilena.gob.cl/

Surgen a finales del siglo XIX, las “Gotas de leche”, la idea original procedía de Francia, donde el médico León Dufour había creado la primera Gota de Leche en 1894.

Dadas las paupérrimas de las clases populares, la idea toma fuerza en Chile y es así como en 1918 se realiza la fundación de la primera Gota de Leche en Valparaíso

De acuerdo a www.memoriachilena.gob, la primera Gota de Leche fue inaugurada en San Bernardo en 1911 y debido al éxito de la iniciativa y al impulso de médicos y trabajadores de la salud, los antiguos dispensarios comenzaron a convertirse en Gotas de Leche en distintas poblaciones de Santiago, intentando hacer frente a la desnutrición infantil y sus consecuencias: la enfermedad y la muerte.

Gota de Leche de Viña del Mar hacia 1920

Una iniciativa fundamental contra la desnutrición

La Dra. Leticia Ávila es una destacada médica chilena, se ha desempeñado en el Ministerio de Salud en distintos periodos, destacando su trabajo por el desarrollo de la salud rural, así como otras iniciativas de índole social y sanitario, explica la experiencia de las Gotas de Leche a lo largo del país, “Las gotas de leche fueron hartas y todavía existen algunas, si vas a Valdivia vas a encontrar Gotas de Leche, en Santiago hay cuatro funcionando todavía, yo trabajé en Gotas de Leche como médico. Cuando se crearon, fueron una real solución, porque se les entregaba alimentos para la familia y leche materna, leche esterilizada en biberones de vidrio. Yo creo que doña Isidora Goyenechea de Cousiño le resultó bien porque ellos tenían viñas y entonces compraban, importaban los elementos y fabricaban botellas, porque se les daba la leche en biberones de vidrio y venían las madres a buscarlos. Estaban repartidas, en Santiago todavía funciona la Gota de Leche que está al lado del Hipódromo Chile, en Independencia hay una que está en calle Conferencia, hay otra que está cerca de la USACH, en el barrio Estación Central, hay una en Valdivia y una en Osorno y funcionan, aunque pienso que están replicando lo que hace el Programa del Niño de la atención primaria. La que está cerca de la USACH está dedicada a hacer diagnóstico y tratamiento de déficit del desarrollo psicosocial de los niños, así que algunas se diversificaron”.

Destaca la aparición de las Gotas de Leche, “En ese tiempo fue capital, porque entendieron la desnutrición junto con las falencias medioambientales de aseo, falta de lavado, falta de agua potable, la higiene, etc. Se reconoció a lo largo de la historia su importancia, luego se creó el Programa Nacional de Alimentación Complementaria, pero la idea nació de allí, y también había distribución de ropita, las señoras tejían, compraban ajuares, lavaban, entregaban pañales y ajuares. Y estaban las instancias de baño, venían las madres con sus niñitos, a bañar a todos sus niños, si tenían cuatro o cinco o seis niños, todos venían a los baños, y en la Gota de Leche que está cerca del Hipódromo Chile, todavía están los bañitos, son unas bañaderas pequeñas con agua caliente. Estaban apuntando a los problemas fundamentales para que lográramos una mejor sobrevivencia del niño, porque la mortalidad era pavorosa”

“Yo hice una investigación al respecto, y fue fundamental en la toma de decisiones del Ministerio de Higiene y Seguridad Sanitaria esta iniciativa, porque la leche para los niños es fundamental. Ahora, lo pasan como un hito de la historia de Chile: sacar a los niños de la desnutrición”, señala la Dra. Ávila.

Dra. Leticia Ávila

Cómo funcionaban las Gotas de Leche

La inscripción de niños y niñas privilegiaba a los de menor edad, idealmente durante los primeros 15 días de nacimiento, y que se alimentaran exclusivamente de leche materna. Sin embargo, la entrega de mamaderas fue una de sus principales acciones debido a las dificultades de las madres para alimentar a sus hijos. Cada Gota de Leche contaba con directores y colaboradores , además de personal médico, enfermeras y visitadoras sociales, entre otros funcionarios.

Cuando se ingresaba al centro, la madre estaba obligada a asistir cada quince días a la consulta. En este día, el niño era bañado y controlado, entregándole a su madre instrucciones para su alimentación y cuidado general. La asistencia a domicilio era un elemento clave para la institución. Sus objetivos primordiales eran la observación del entorno y la vigilancia del cumplimiento de las indicaciones médicas. En cada visita se contemplaba la situación del niño, de la madre, de la familia y de la vivienda.

Más información en: https://www.memoriachilena.gob.cl/archivos2/pdfs/MC0053009.pdf

El modelo de las Gotas de Leche de Valparaíso fue una manera modernizada de caridad infantil que se sustentó en procedimientos científicos. Sus espacios se concibieron como verdaderas escuelas de puericultura que transmitieron el conocimiento de la ciencia de la crianza de los hijos a las madres del mundo popular. La gran cantidad de familias que atendieron eran mujeres que no tenían ninguna clase de previsión social y, por ende, estaban al margen de toda ley que las protegieran. Estas familias eran de escasos recursos, situación que se veía agravada por la cesantía, bajos salarios y problemas de alcoholismo por parte del jefe de familia. Asimismo, los lactantes atendidos comúnmente padecían de enfermedades broncopulmonares, sarampión y coqueluche y presentaban un peso “subnormal” por estar “muy abandonados en alimentación y cuidados” (Fuente: LA MATERNIDAD CIENTÍFICA A PARTIR DE LA LABOR DE LAS GOTAS DE LECHE DE VALPARAÍSO: GOTA CENTRAL Y GOTA DE LECHE DEL HOSPITAL DE NIÑOS (1918-1944) Historia 396, Valparaíso v. 13, n. 2, pp. 437-462, jul-dic. 2023